Las casas en terraza de Éfeso son uno de los lugares estrella de la visita al mega-recinto arqueológico de esta antigua ciudad, una de las más importantes del mundo hasta prácticamente tiempos de Justiniano I. Pero, ¿qué son exactamente? ¿Merece la pena visitarlas? En este post te damos las claves de este espacio, que no todos llegan a descubrir por los motivos que analizamos a continuación.
Qué son las casas en terraza de Éfeso
En el lado sur de la Vía de los Curetes (la principal calle de aquella antigua ciudad) se ubican las denominadas casas adosadas o casas en terraza de Éfeso. Otro nombre popular con el que se las conoce nos da pistas de lo que fueron: las casas de los ricos. En efecto, aquí vivían los residentes más poderosos y adinerados, que erigieron estas viviendas de varias alturas en lo alto de una pequeña colina, donde anteriormente se ubicaba el cementerio de la ciudad.
En total, son 6 viviendas o unidades residenciales, construidas en diferentes épocas. La más antigua se remonta al siglo I. Su referencia a las terrazas indica estaban construidas a varios niveles, lo que propiciaba que las vistas panorámicas fuesen privilegiadas, pues se ubicaban justo en frente del Templo de Adriano. Y pese a ubicarse en un espacio de relieve irregular, estaban perfectamente integradas en el plan hipodámico (en retícula) de la ciudad.
Este aspecto es difícil de comprender en la actualidad, pues las casas están techadas con una estructura moderna para poder protegerlas de la intemperie. No obstante, este techo es también un aliado de los visitantes que quieren protegerse de los rayos del sol en las horas de más calor del verano.
Y como ocurre con toda vivienda de la clase adinerada, no se escatimó en su decoración ni en sus comodidades. De hecho, aquí se pueden contemplar algunas de las pinturas murales mejor conservadas de todo el imperio romano, lo que demuestra la maestría de los artistas romanos y su estilo naturalista, que no volvió a alcanzar cotas similares de perfección hasta el Renacimiento.
Por otro lado, no faltan los mosaicos para el pavimento, todo un clásico que distinguía a las residencias de los más acaudalados. Además, el empleo de mármoles en determinados puntos de las viviendas (así como pinturas al fresco imitándolos) resultan también inconfundibles.
En algunas viviendas se pueden apreciar todavía detalles llamativos de la vida cotidiana de sus familias, como una lista de la compra o poemas de amor, o los clásicos baños con piscinas de agua caliente y fría, precedentes de los baños turcos. Además, el sistema de calefacción por gloria también ha sido identificado, realmente avanzado para su época.
Cómo visitar las casas y otras consideraciones
Si tienes pensado visitar las casas en terraza de Éfeso, debes tener en cuenta varias consideraciones. Una de ellas es que, para acceder, es necesario comprar otro ticket aparte. Dado que se trata de una visita opcional, estas entradas no suelen estar incluidas en los paquetes turísticos, así que te recomendamos tratar este punto a la hora de planificar tu viaje para que no haya dudas al respecto. En el caso de Turquía Exclusiva, podemos tramitar las entradas con acceso a este espacio.
Por otro lado, debes tener en cuenta que no son espacios habilitados para personas con movilidad reducida. Por tanto, moverse por aquí puede ser complicado no sólo para quienes usen sillas de ruedas, sino también para personas con otras limitaciones físicas.
Para poder moverse por el interior de las casas en terraza de Éfeso, se han habilitado pasarelas y suelos acristalados, que permiten contemplar los mosaicos y los cimientos de las viviendas, y entender así su estructura. Dentro de este espacio techado hay carteles informativos, aunque lo más recomendable para admirar el conjunto es visitarlas con un guía experto, como los que proporciona nuestra agencia.
