Los Museos Arqueológicos de Estambul se suman a una lista riquísima de museos de este tipo en Turquía. Resulta difícil decir cuál es el más importante, pues cada uno atesora auténticas joyas del pasado de este país. Por ejemplo, el Museo de las Civilizaciones de Anatolia es una institución de referencia en la capital, Ankara, especialmente por su vinculación a la civilización hitita y a Çatalhöyük. O bien los magníficos museos arqueológicos ligados a yacimientos específicos, como el de Troya o el de Selçuk (Éfeso).
Además, los Museos Arqueológicos de Estambul cuentan con una importante ‘competencia’ dentro de la ciudad, pues hay otros museos y monumentos que atraen más flashes si cabe, como las mezquitas, el Palacio Topkapi o la Torre de Gálata. Sin embargo, los amantes de la historia disfrutarán una visita a este recinto, del que te damos más detalles a continuación.
Museos Arqueológicos de Estambul: cuáles y dónde están
Como decíamos en el título, es preciso hablar de museos arqueológicos de Estambul, en plural, pues este nombre engloba tres museos especializados en determinados periodos y aspectos del pasado. Son los siguientes:
- Museo de Arqueología
- Museo del Antiguo Oriente
- Pabellón de los Azulejos
Además, están muy cerca entre sí: son adyacentes al Palacio de Topkapi, pero se trata de visitas distintas y recintos diferentes. Además, los Museos Arqueológicos de Estambul ocupan tres edificios distintos, aunque pegados entre sí. El más grande, sin duda, es el Museo de Arqueología, mientras que el Pabellón de los Azulejos es el más pequeño.
En el momento de redacción de este artículo (julio de 2025), el Museo del Antiguo Oriente se estaba sometiendo a una profunda rehabilitación, por lo que atraerá de nuevo nuestra atención en el futuro. Y al Pabellón de los Azulejos merece también un post aparte, dada la rica y colorida colección de esta artesanía turca. Por ello, a continuación hacemos una breve mención al Museo de Arqueología.
Museo de Arqueología: principales piezas
Es importante percibir este sutil matiz en el nombre: no es lo mismo “Museos Arqueológicos de Estambul” (los tres mencionados) que “Museo de Arqueología” (uno de ellos, el más grande y quizás más importante). En este espacio se exhiben numerosas e importantes piezas recuperadas en territorios del imperio otomano, en los primeros tiempos de la arqueología moderna y cuando aún existía esa entidad política (siglo XIX y principios del XX). Uno de los grandes artífices de este museo fue Osman Hamdi Bey, director de la institución en 1881 y responsable de numerosas excavaciones a lo largo y ancho del imperio.
Es por ello que uno de sus grandes atractivos es la colección de sarcófagos de la necrópolis real de Sidón, en el actual Líbano. En especial, el llamado Sarcófago de Alejandro y que se llama así por sus relieves sobre Alejandro Magno. Su estado de conservación es extraordinario, lo que permite admirar la pericia de los artistas helenísticos del siglo IV a.C a la hora de elaborarlos en mármol del Pentélico, aunque se sabe que estaban policromados.
El Sarcófago de Sidamara poco tiene que envidiar al anterior: hecho en el siglo III d.C y procedente de Konya (antigua Iconium romana), donde la minuciosidad de ropajes y cuerpos resulta realmente magistral. Y lo mismo ocurre con el fenomenal Sarcófago de las Plañideras, llamado así por representar a estas mujeres en actitudes de tristeza, que refuerzan el carácter solemne de dicho sarcófago.
En otras salas, la colección muestra pavimentos de mosaico romanos y bizantinos, así como restos arquitectónicos de civilizaciones de Anatolia en la Antigüedad, como la bitinia. No obstante, debido al proceso de reestructuración del Museo del Antiguo Oriente, la distribución de las piezas en las salas puede variar en el futuro, cambiando de ubicación.